La estrategia KIROI, desarrollada por Sanjay Sauldie, ofrece un enfoque estructurado para que los creativos integren la inteligencia artificial en los procesos artísticos teniendo en cuenta tanto los aspectos tecnológicos como los éticos. Promueve la formación específica de los creativos para que puedan utilizar eficazmente las herramientas de IA sin comprometer su visión artística. Al proporcionar apoyo en las áreas de análisis de datos, selección de herramientas y adaptación cultural, la estrategia KIROI ayuda a llevar el trabajo creativo a un nuevo nivel.
Movie meets Media es un renombrado evento del sector que reúne cada año a destacadas personalidades de la industria del cine, los medios de comunicación y el entretenimiento. El evento sirve de plataforma para el intercambio de ideas, la creación de redes y la presentación de nuevos proyectos, tendencias y tecnologías. Atrae a un público exclusivo de productores cinematográficos, directores, actores, guionistas y expertos en medios de comunicación, y ofrece una visión única del futuro de la industria a través de mesas redondas de alto calibre, estrenos y ceremonias de entrega de premios.
He aquí algunas de las mejores prácticas que he aprendido asesorando a creativos en el campo de la inteligencia artificial:
1. Productores de cine: Eficacia y creatividad van de la mano
Buena práctica 1: Análisis de mercado basados en IA para identificar tendencias
Los productores de cine se enfrentan a menudo al reto de reconocer las tendencias del mercado y desarrollar películas que toquen la fibra sensible de la época. Con la IA, los productores pueden analizar enormes cantidades de datos procedentes de las redes sociales, las consultas de búsqueda, el comportamiento de streaming y las críticas de películas para comprender qué temas, géneros y actores están de moda en la actualidad. Un ejemplo concreto sería el uso de herramientas de IA como IBM Watson o Google Cloud AI para analizar estos datos y crear cuadros de mando visuales que informen a los productores en tiempo real.
Procedimiento:
- Integración de una herramienta de análisis asistida por IA en el sistema de planificación de la producción.
- Revisión periódica de los datos y ajuste de las estrategias de producción en función de los resultados.
- Colaborar con los equipos de marketing para incorporar los resultados a las estrategias de promoción.
Buena práctica 2: Optimización de presupuestos y calendarios mediante IA
La IA puede optimizar complejos presupuestos y calendarios de producción simulando diferentes escenarios y minimizando riesgos. Herramientas como "Cinelytic" o "StoryFit" utilizan el aprendizaje automático para evaluar los riesgos financieros y hacer predicciones sobre el éxito potencial de una película.
Procedimiento:
- Introduzca los parámetros del proyecto (presupuesto, plazo, actores) en la herramienta de IA.
- Análisis de los resultados de la simulación y adaptación del plan de producción.
- Actualice periódicamente los datos durante la producción para realizar ajustes en tiempo real.
Buena práctica 3: IA para la selección de localizaciones cinematográficas
Con la IA, los productores pueden seleccionar las mejores localizaciones en función de la logística, las condiciones meteorológicas, los incentivos fiscales y la estética. Algoritmos como los de "FilmHedge" ofrecen recomendaciones basadas en datos que tienen en cuenta tanto los aspectos creativos como los financieros.
Procedimiento:
- Cree una lista de posibles lugares de rodaje e introdúzcala en la herramienta de IA.
- Análisis de las recomendaciones basadas en los requisitos específicos de la película.
- Selección de los lugares óptimos de rodaje y preparación de las autorizaciones y la logística necesarias.
2. Directores: fusión de visión y tecnología
Buena práctica 1: Planificación de escenas virtuales con IA
Los directores pueden utilizar la IA para visualizar escenas virtuales por adelantado. Con la ayuda de herramientas como "Previs" o "NVIDIA Omniverse", pueden crear modelos 3D de localizaciones y personajes y probar distintos ajustes de cámara antes de empezar el rodaje.
Procedimiento:
- Creación de un storyboard digital de las escenas más importantes.
- Uso de la IA para crear escenas virtuales y realizar pruebas de cámara.
- Revisión y ajuste de las grabaciones en función de los resultados de las simulaciones.
Buena práctica 2: Inteligencia artificial para analizar las interpretaciones de los actores
Los directores pueden utilizar la IA para analizar y evaluar los matices emocionales de las interpretaciones de los actores. Herramientas como "Emotion AI" de Affectiva pueden captar sutiles señales emocionales difíciles de reconocer por el ojo humano, lo que ayuda al director a seleccionar las mejores tomas.
Procedimiento:
- Grabación de las escenas e introducción del material fílmico en la herramienta Emotion AI.
- Analizar la interpretación del actor basándose en señales emocionales y no verbales.
- Selección y puesta a punto de las escenas finales a partir de las recomendaciones de la IA.
Buena práctica 3: Sugerencias de corte automatizadas mediante IA
La IA puede hacer sugerencias de montaje cribando enormes cantidades de material en bruto y sugiriendo los mejores cortes en función del estado de ánimo deseado, el ritmo y los aspectos emocionales más destacados de la película. Herramientas como "Adobe Sensei" ofrecen estas funciones y ahorran a los directores un valioso tiempo en la sala de montaje.
Procedimiento:
- Importación de todo el material de la película al programa de edición con IA integrada.
- Definición de los parámetros deseados de la película (tempo, estado de ánimo, género).
- Revisión y ajuste de las sugerencias generadas por la IA por parte del director para garantizar el pulido creativo.
3. Guionistas: llevar el arte de contar historias al siguiente nivel
Buena práctica 1: Generación de historias asistida por inteligencia artificial
Los guionistas pueden utilizar la IA para generar nuevos argumentos, personajes y diálogos. Herramientas como "ScriptBook" y "DeepStory" analizan los guiones existentes y ofrecen sugerencias de giros, diálogos y evolución de personajes que pueden mejorar el flujo narrativo.
Procedimiento:
- Introduzca el guión existente o una lista de ideas en la herramienta de IA.
- Analizar y seleccionar propuestas de nuevos argumentos y desarrollos de personajes.
- Integración de las ideas seleccionadas en el guión y revisión del mismo para mantener el flujo creativo.
Buena práctica 2: Inteligencia artificial para analizar las expectativas del público
La IA puede analizar grandes cantidades de comentarios de la audiencia y las redes sociales para identificar patrones que proporcionen información sobre las expectativas del público. Esto ayuda a los guionistas a escribir historias creativas y atractivas para las masas.
Procedimiento:
- Recogida de datos de críticas de cine, redes sociales y otras fuentes.
- Analizar estos datos con una herramienta de IA para identificar los gustos de la audiencia.
- Adapte el guión en función de estos resultados sin comprometer la visión creativa.
Buena práctica 3: Optimización lingüística automatizada
Herramientas de IA como "Grammarly" o "Hemingway Editor" pueden ayudar a los guionistas a que los diálogos sean más precisos y atractivos. Analizan el texto en busca de claridad, tono e impacto emocional y ofrecen sugerencias para mejorarlo.
Procedimiento:
- Introduzca los diálogos en la herramienta de IA para su análisis.
- Revisar las propuestas y adaptar los textos para conseguir el tono y la profundidad emocional deseados.
- Revisar y afinar repetidamente el diálogo para garantizar su autenticidad y eficacia.
4. Actores: perfección y versatilidad gracias a la IA
Buena práctica 1: Análisis de funciones con ayuda de la IA
Los actores pueden utilizar la IA para empatizar más intensamente con sus papeles. Herramientas como "Character.AI" analizan los perfiles de los personajes y ofrecen a los actores una visión más profunda de las motivaciones, las emociones y el comportamiento de sus personajes.
Procedimiento:
- Introduce el perfil del personaje y el guión en la herramienta de IA.
- Analizar y estudiar los estudios de personajes propuestos para comprender mejor el papel.
- Aplicar los conocimientos adquiridos durante los ensayos y la filmación para perfeccionar la representación.
Buena práctica 2: IA para mejorar las técnicas de voz y habla
Los actores pueden utilizar herramientas de IA como "Voice AI" para entrenar su voz, aprender dialectos o expresar con precisión distintas emociones. Estas herramientas proporcionan comentarios personalizados y ayudan a los actores a mejorar sus habilidades vocales.
Procedimiento:
- Grabar muestras de habla y analizarlas con la herramienta de IA.
- Aplicación de comentarios y práctica de técnicas específicas para mejorar la interpretación vocal.
- Entrenamiento y perfeccionamiento regulares de la voz para aumentar su versatilidad y expresividad.
Buena práctica 3: Profesores de interpretación virtuales
Los entrenadores virtuales con IA ofrecen a los actores sesiones de entrenamiento personalizadas y les ayudan a mejorar su técnica. Estos entrenadores de IA pueden analizar expresiones faciales, gestos y expresiones físicas y sugerir mejoras específicas.
Procedimiento:
- Realización de ejercicios de interpretación delante de una cámara conectada al entrenador de IA.
- Análisis de las grabaciones por el entrenador de IA y comentarios sobre el lenguaje corporal, la expresión y la técnica.
- Aplicación de la retroalimentación en el proceso de actuación para lograr una actuación más intensa y auténtica.
La inteligencia artificial como catalizador creativo
La IA está cambiando la industria cinematográfica de manera fundamental, permitiendo a productores, directores, guionistas y actores redescubrir y ampliar su creatividad. Aunque existen ciertas dudas sobre el papel de la IA en las artes, está demostrando ser un valioso complemento que permite crear películas innovadoras y atractivas que emocionan al público de nuevas maneras.
Al integrar los 9 pasos de la estrategia KIROI en su forma de trabajar, las organizaciones artísticas pueden garantizar que la implantación de la IA no sólo sea técnicamente eficaz, sino también cultural y éticamente responsable. Desde la formación y el desarrollo del personal hasta el fomento de un entorno creativo basado en la IA, el futuro de la escena artística es apasionante y está lleno de posibilidades.