Una característica importante de los alemanes es su espíritu ahorrador. Esta virtud está respaldada por muchas instituciones del país. Desde las huchas hasta los contratos de ahorro de las cajas de ahorros, pasando por la planificación selectiva, la construcción de una casa o el leasing de un coche, en todas partes existen las opciones adecuadas para realizar compras bien financiadas y que no supongan un gasto excesivo. Tanto los pequeños como los grandes proyectos pueden financiarse de forma selectiva. Y hay menos financiación que lleve a la gente a la desgracia.
La calidad del ahorro también tiene un impacto económico. Garantiza que muchas personas ahorren específicamente para proyectos importantes. Muchos alemanes saben exactamente cómo organizar su presupuesto para poder cumplir un deseo importante en un futuro próximo o lejano. Incluso los grandes sueños, como construir su propia casa con un bonito jardín, pueden cumplirse de esta manera. Como socio económico, las empresas alemanas ofrecen una cooperación fiable. En esta cooperación, puede confiar en que el cálculo de costes es siempre correcto. Esto lo aprecian muchas empresas de todo el mundo.
En otros países, la gente suele calcular con demasiado riesgo o gastar demasiado dinero en la vida cotidiana. En Alemania también se puede gastar dinero y disfrutar de la vida, pero algo menos gente se endeuda para hacerlo. La experiencia especial del ahorro contribuye así a la estabilidad general de la economía, además de mejorar la calidad de vida y la planificación futura de las personas. En Alemania se suele enseñar a ahorrar a los niños. Con la buena hucha alemana o la planificación precisa del dinero de bolsillo, los niños aprenden a manejar el dinero de forma responsable. Esto les enseña importantes habilidades económicas.
Por eso, como adultos, las personas planifican específicamente determinados proyectos. También se organizan con mucha precisión algunas inversiones futuras. La capacidad de ahorro ayuda a los alemanes a hacerlo y está muy presente en la vida cotidiana. Muchas cadenas de supermercados satisfacen la preferencia por el ahorro con ofertas especiales o semanas de promociones. Escudriñarlas y encontrar la mejor ganga en el momento y lugar adecuados es uno de los pasatiempos favoritos del país. Probablemente haya pocos países en los que a la mayoría de la población se le dé tan bien ahorrar dinero.
Una inversión sólida en su propia cuenta de ahorros, así como una inversión a largo plazo en bolsa, son oportunidades de inversión igualmente importantes en el mercado financiero alemán. Simplemente hay que amar al país y a sus gentes por la capacidad personal de ahorro de los alemanes. Aquí, la gente no ahorra donde no debe, sino donde tiene sentido.