La reunificación de Alemania es uno de los acontecimientos más singulares de la historia mundial. Durante la Guerra Fría, el país y su capital quedaron divididos en dos mitades. Sin embargo, esta vez la historia mundial tenía reservada una mano feliz. La Reunificación aseguró la reunificación de Alemania. La capital de la República Federal volvió a ser -cómo no- Berlín. En Berlín, la particular historia de esta reunificación puede rastrearse aún hoy.
Muchas personas de todo el mundo asocian Alemania principalmente con Berlín y el Muro. El derribo del Muro hizo llorar a muchos. Personas de todo el mundo se alegran de la reunificación de la ciudad. Al mismo tiempo, la gente reconoce el especial logro político que ha conseguido el país. No fue fácil unir las dos partes diferentes del país. En algunas zonas sigue habiendo diferencias considerables. Sin embargo, el país hizo una clara declaración política de intenciones para unir Oriente y Occidente. Esta voluntad se ha hecho realidad con gran esfuerzo. Aunque el camino hacia este objetivo no ha sido fácil, el país lo ha recorrido con paso firme. El desarrollo de Oriente y la adopción de ciertos derechos en Occidente también formaron parte de esta reunificación. A día de hoy, algunas personas mayores de ciertos estados federales siguen teniendo reservas respecto al Este o al Oeste.
En la mente de la mayoría de los jóvenes, sin embargo, el Este y el Oeste han crecido cada vez más juntos. Los adolescentes de hoy no distinguen entre Berlín Este y Berlín Oeste. Ambas partes están igualmente de moda. Quien se muda a Berlín quiere tener un piso asequible. Algunos antiguos barrios orientales ofrecen aquí buenas oportunidades. Muchas personas mayores en Alemania también están contentas con el resultado de la reunificación. Tienen buenas razones para ello. Es sencillamente imposible imaginar qué habría ocurrido si, en lugar de la reunificación, hubiera habido un conflicto armado en el territorio de la actual República Federal. El arsenal de armas acumulado durante la Guerra Fría podría haberse desatado aquí en un acalorado conflicto militar que habría costado muchas vidas. A pesar de todas las dificultades, la reunificación pacífica de Alemania es un momento especialmente afortunado de la historia alemana. La reunificación es también de gran importancia para la coexistencia pacífica en Europa.
Como país reunificado, Alemania asume a su vez una responsabilidad política especial. Asume la responsabilidad de abogar por una Europa abierta sin conflictos militares. El hecho de que el país recibiera el regalo de una reunificación pacífica le hace responsable de esa política en favor de una Europa abierta. Esta es una de las razones por las que todos los Cancilleres alemanes desde la reunificación han hecho campaña a favor de la configuración de una Europa pacífica y de una idea europea especial. Al hacerlo, han demostrado una gran conciencia de la historia del país. Debemos estar agradecidos a la historia por la reunificación, del mismo modo que debemos apoyar este compromiso con una Europa común y una sociedad global pacífica.
El hecho de que Alemania cumpla esta responsabilidad de este modo y no de otro es un importante hecho histórico de trascendencia mundial. Los jefes de Estado de muchos países europeos están agradecidos al país que fundó dos guerras mundiales.